La entrada es conjunta a la catedral de Zaragoza y el Museo de Tapices y cuesta 4€ el pase general y 3€ para los inferiores de 18 años y los mayores de 65 años. Diversos objetos, pinturas, estatuas y vestiduras (casullas, etc.) de los siglos XVI al XVIII completan la compilación de la catedral. En el muro de los pies del trascoro está la capilla del Beato Cristo . El lado de la derecha está dedicado a San Valero, el primer relieve de la derecha muestra su calvario, seguido de una figura del santo a su izquierda y por último un relieve de San Valero presidiendo un concilio. En el lado de la izquierda un relieve de San Valero y mártir, una estatua de San Lorenzo y al final el calvario de San Lorenzo.
- El primer cimborrio comenzó a ser erigido en 1346 por Domingo Serrano y Juan de Barbastro.
- CATEDRAL DE LA SEO. Los ábsides románicos se edifican en el siglo XII sobre la mezquita mayor.
- En los extremos, figuras de Santa Lucía y Santa Apolonia efectuadas en madera.
- Más allá de ser una obra provisional, el edificio permaneció en este estado hasta finales siglo XII.
- Además de esto, esta considerada como entre las compilaciones de entapices más esenciales y valiosas de todo el mundo.
- Durante la Guerra Civil Española un avión lanzó 2 bombas sobre la basílica y no reventaron.
- La cabecera de La Seo está formada por un profundo ábside central que en origen estuvo flanqueado por 2 más pequeños y 2 capillas cuadradas abiertas al crucero, conservándose en la actualidad únicamente el ábside del evangelio.
- En verdad el muro cierra la capilla de San Miguel, levantada por encargo del arozobispo Lope Fernández de Luna como capilla funeraria, para guardar dentro suyo el sepulcro en alabastro del prelado.
- La Catedral del Salvador de Zaragoza, la Seo,fue la primera catedral católica construida en la ciudad más importante aragonesa.
Levantada a un paso de la basílica del Pilar, la catedral del Salvador te atrapará por su belleza y por su ecléctica mezcla de estilos. Los datos personales otorgados voluntariamente por el usuario, a través del presente formulario van a ser tratados, por Go Aragón S.L. Como responsable del régimen, con el objetivo de administrar su participación en el blog, siendo preservados mientras que no nos solicite la supresión de la información. Sus datos se van a hacer públicos en la página web, siendo accesibles a cualquiera de los individuos de esta. Puede usted ejercer los derechos de ingreso, rectificación o supresión de sus datos, dirigiéndose a para mucho más información al respecto, puede consultar nuestra Política de Privacidad.
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Data del siglo XIV y en sus cuadros se abren grandes ventanales apuntados de tracería; de arquillos sostenidos en finas columnas que rematan en filigrana de rosetones, formando una celosía dentro del arco. Sobre este segundo tramo hay una cornisa de merlones, adornados con cerámica vidriada de color azul, verde y blanca y rematados con pirámides. Las torres, alzadas en su mayor parte en el siglo XX, alcanzan los noventa y ocho metros de altura.
El interior está cubierto por una cúpula elíptica sobre pechinas muy trabajada en yeso y similar a la de la capilla de San Valero. Gobernado por la figura de Beato Dominguito de Val crucificado, vestido con las ropas de los Pequeños del Coro de la catedral. A los lados, estatuas de San Francisco Javier y San Ignacio de Loyola y rematando el retablo, un cuadro de la Virgen de Guadalupe. Los muros están cubiertos con pinturas que Camón Aznar atribuye a Bartolomé Vicente. Los cuadros cuentan el milagro que ocurrió en la catedral en 1427, en el momento en que un moro procuró profanar la Sagrada Forma que una mujer había guardado durante la eucaristía, transformándose la Forma en un hermoso niño.
Catedrales, Colegiatas Y Santuarios
De hermosa factura y buenas proporciones, es el actual cimborrio, que corona el crucero de la catedral y también ilumina el presbiterio, efectuado en el siglo XVI, entre las postrimerías del gótico-mudéjar y el principiante estilo Renacentista. Siguiendo un itinerario esencialmente cronológico, la visita debe iniciarse por el exterior de los ábsides de la que fuera mezquita mayor de la ciudad árabe y en su tramo inferior denotan su inequívoco origen románico en lo que se refiere a su reforma cristiana se refiere. El interior de los ábsides -se conservan 2 de los tres auténticos- conserva, en su decoración y composición, aunque camuflada por siguientes añadidos, su prístino carácter románico original, de finales del siglo XII, con un interesantísimo grupo escultórico en las arquerías. Justo al costado podemos consultar cómo se alza la torre campanario, que tiene cuatro cuerpos completados en estilo barroco de roma. Su interior es mudéjar, si bien algunos defienden que puede ser parte del viejo minarete árabe.
En el centro del muro de los pies del trascoro está la capilla del Beato Cristo, de las mejores de la Catedral. Fue construida a la vez que las demás capillas del trascoro, pero ya entre 1634 y 1639 fue cambiada para ser capilla funeraria por don Martín de Fuentes, canónigo carcelario y después obispo de Albarracín. Es esta la capilla que pidió este arzobispo para erigir su panteón familiar, y por tanto, dispuso de todos los recursos económicos para llevar a cabo de ella un importante conjunto artístico. Para esto disponía de un espacio de planta cuadrangular que fue cubierto con bóveda de crucería estrellada, aunque la que nos ha llegado es fruto de una reforma barroca de 1640. Fueron preparados tres retablos en alabastro, el central dedicado a san Bernardo y los laterales al propio prelado y a su madre.
El interior es de estilo gótico, barroco y renacentista y no hay ni un rincón en el que quepa duda de ello. Los pilares, las esculturas, las bóvedas, los arcos, los blancos y dorados… Protegido por una reja de bronce de cronología más tardía, se compone de 117 sitiales labrados en madera de nogal entre 1445 y 1447, siendo restaurado parte del conjunto en 1532 al quedar dañado tras el derrumbe de entre los pilares del crucero. El trascoro, de estilo plateresco, fue solicitado por el obispo Hernando de Aragón a mediados del siglo XVI. Después de varias reformas y ampliaciones, realizadas entre los siglos XII y XVIII, se concluyó la catedral que llegó hasta nuestros días, donde el paso de las culturas y los estilos arquitectónicos que brotaron en cada época, dejaron su huella en este magnifico templo.
A la derecha de la puerta primordial está una entrada mucho más pequeña por la que se ingresa a la Parroquieta. Hoy en día es una iglesia de cinco naves y seis tramos cubiertos por cúpulas de crucería de la misma altura. En la cabecera se ubican 2 ábsides y, en el lado de la epístola, sobre 2 de los desaparecidos, se emplazó la sacristía. Al radical del lado del evangelio se construyó la «Parroquieta» para albergar el sepulcro de Lope de Luna. Con una fusión de estilos que han sabido “convivir” con perfección , los principios de la Seo datan delsiglo XII, cuando se integró su construcción en lo que era la antigua Mezquita Aljama.
La puerta primordial, ubicada en el muro oeste y usada para el culto, es la de la fachada neoclásica que da a la plaza de la Seo, donde estuvo también el acceso de la mezquita. Fue encargada por el arzobispo Añoa a Julián Yarza, un acólito de Ventura Rodríguez. Presentó su proyecto en 1763, basándose en la proyectada para la puerta de san Bartolomé por Ventura Rodríguez, que no se llegó a comenzar. Las proyectos se extendieron hasta 1767 y fue construida en piedra, ladrillo y yeso. El revoque de pintura blanca actual la ha despojado de los contrastes materiales de la original.
Entre los elementos mucho más bellos es Muro Gótico-Mudéjar, en el del costado izquierdo , levantado en el siglo XIV con ventanales de estilo gótico y adornado con cerámicas, de las piezas mucho más esenciales del mudéjar aragonés. Como nos encontramos en el centro, no puede faltar una visita a las calles del mítico Tubo, auténtico santuario del tapeo zaragozano, con una oferta gastronómica casi interminable. Desde allí podemos continuar con una visita a La Seo, la otra catedral de la región, en la que no hay que perderse el muy bello muro de la Parroquieta, efectuado en estilo mudéjar por maestros aragoneses y alarifes hispalenses. Ahora fuera del centro histórico, hay que visitar la Aljafería –un viejo palacio de época taifal reformado por los Reyes Católicos– y dar un paseo por la zona de la Expo, con joyas de la arquitectura moderna como la Torre del Agua o el Pabellón Puente, de Zaha Hadid.
En 1360, a lo largo del arzobispado de Lope Fernández de Luna, se levanta la testera principal de la Pabostría que, excepto algunos restos, no se ha conservado. Exactamente el mismo arzobispo manda edificar una capilla encargada de San Miguel Arcángel, la llamada «Parroquieta», todo en estilo gótico-mudéjar. Se trata de un espacio cuadrado y ajustado que se inserta como una capilla cerrada y también sin dependencia en el edificio y que don Lope proyectó como su capilla funeraria.